YO NO ENTIENDO A LA GENTE GRANDE...

¿Por qué tapan la luz del sol? Quitan las flores de las plantas para dejarlas marchitar en un jarrón? ¿Por qué enjaulan a los pajaritos y ponen pececitos en frascos?¿Por qué pintan todas las cosas de gris y llenan el cielo de antenas y chimeneas?
YO NO ENTIENDO A LA GENTE GRANDE...
Porque se creen importantes, por el sólo hecho de ser grandes.Porque no me dejan caminar descalzo ni chapotear en la lluvia, ni acostarme tarde.Porque me compran juguetes y luego no quieren que los use porque se rompen.
YO NO ENTIENDO A LA GENTE GRANDE...
Porque le han puesto nombre difícil a las cosas más sencillas.Porque se pegan entre ellos o se pasan la vida discutiendo e insultándose.Porque quieren empleos importantes y se la pasan sentados en sillas.
YO NO ENTIENDO A LA GENTE GRANDE...
Porque no sienten el placer de perder el tiempo mirando a su alrededor... Y son incapaces de dar vueltas en un carrusel, de jugar con la arena de la playa, de contar las estrellas.Porque cuando me porto mal me amenazan con una inyección y cuando me enfermo me dicen que una inyección me va a poner bien.
YO NO ENTIENDO A LA GENTE GRANDE...
Porque quieren que coma con horarios.Porque cuando pregunto algo no me contestan, porque soy chico y cuando pido mi tetero, dicen que ya soy grande.Porque siempre se hacen los lindos y serios. Porque dicen mentiras y ni ellos mismos se las creen.Porque cada vez que me mienten me doy cuenta y sufro mucho.
YO NO ENTIENDO A LA GENTE GRANDE...
Porque dicen que nos sea miedoso y ellos mismos son los que me hablaron de cocos y fantasmas.Porque me piden que sea bueno y me regalan para jugar: pistolas, dardos y flechas.Porque han llenado la casa de cristales, porcelana y cosas que se rompen y ahora resulta que no puedo tocar lo que veo.
YO NO ENTIENDO A LA GENTE GRANDE...
Porque perdieron las ganas de correr y saltar.Porque siempre tienen prisa y le piden permiso al reloj.
YO NO ENTIENDO A LA GENTE GRANDE...
Porque cuando hago algo mal, me dicen: “NO TE QUIERO MAS”.Y tengo miedo que me dejen de querer en serio.

Anonimo